Estos poemas (y otros poquitos) acaban de ver la luz: la Editora Regional de Extremadura ha publicado la antología Piedra de toque. Quince poetas emergentes en Extremadura, en la que aparezco junto a catorce autores maravillosos gracias al buen hacer de Daniel Casado.
Me dices que es absurdo el universo,
que la vida carece de sentido.
Pero no es un sentido lo que busco,
cualquier explicación o una promesa,
sino el estar aquí y a la deriva.
Vicente Gallego
Día
I
Ven
a romper
aguas.
Viértete.
Es
pronto, amor, para el naufragio,
me
aseguras. Nos quedan todavía
más
de doscientas noches oceánicas.
Por
la mañana
un
cuerpo flota a pocas millas.
Alguien
te contará
que
he tocado tierra.
Está
amaneciendo y tengo
las
manos encharcadas de quererte.
Día
II
Concedes
entrevistas, saludas
pendida
de un pañuelo de papel.
Parece que esperaras
los
restos de un lujoso desastre:
dime, ¿tú crees que saltó?
Hay un cuerpo que se ofrece
a bajar de tu brazo a la bodega.
Lo perpendicular de la luz te seduce.
No tengo prisa: bebo del mar y sé
que estas muescas a modo de memoria
mañana volverán a ser pulmones.
dime, ¿tú crees que saltó?
Hay un cuerpo que se ofrece
a bajar de tu brazo a la bodega.
Lo perpendicular de la luz te seduce.
No tengo prisa: bebo del mar y sé
que estas muescas a modo de memoria
mañana volverán a ser pulmones.