lunes, 30 de mayo de 2016

Concisión - concesión - confesión - confección.

Quizás lo que ocurre
es que me estoy sobreviviendo.

*

Tendré que empezar a pensar en la existencia:
nacer,
crecer,
reproducirte. 

*

La memoria
es un hábito:
repite, repite, acostumbra,
esconde, esconde, aprieta.

lunes, 16 de mayo de 2016

En esta decadencia calmada.

Ya no soy inocente.
Pero sigo buscando debajo de la grava
agua que huela, que manche, que entinte, que sepa
sobre todo, que sepa,
que venga de vuelta plagada de dudas, lega,
dispuesta a poseerme.
Ya no soy inocente.
En todas las batallas me falló la estrategia
la paz que busco suena, se mueve, desaparece
lo sé: es privativa, 
puedo ver cómo sujeta mi nombre y lo exprime
estoy seca, le duelo,
su ausencia me amamanta
y no crezco, ahondo,
sigo el rastro de un mineral suficiente
un mapa, un espejo, una razón que nos baste.


Hay una dignidad oscura en esta 

decadencia calmada, en este ejemplo
elevado de civilización
consiste en mirar, entre curioso
y distraído, cómo se derrumban
los ideales en que alguna vez
creíste, cómo ceden las defensas
frente al empuje de los bárbaros,
el modo en que las cosas se acomodan
a su insignificancia.

Javier Cánaves

martes, 29 de marzo de 2016

Aquel sol casi nos hace trizas.

"Conviene que no diga todo lo que pienso.
Me abrasaría la boca"
Carmen Camacho

Duerme un hombre en mi puerta: nadie lo mira.
Me adorno la tristeza.
Me cae sobre la frente una ramita
y se me vuelve enredadera. 
Alumbra las penas cotidianas
que me guardan las pupilas.

La sombra me cubre la boca
me protege
de mí misma.

viernes, 26 de febrero de 2016

Ausencia leve como carne de niño.

Para sacarle al tiempo las raíces
y perforar la tierra de mi infancia
y poner sobre el mapa lo perdido
como el que exige un trago, otro, otro
así mis manos suplican clemencia.

Han venido a deshacer nuestra casa
a lanzarnos al mar, a alimentarnos
con nuestra savia, con nuestra derrota
y nos hacen heridas las cadenas
si nos dejan abiertos los candados.

Redimidos, por la fuerza, culpables
de acariciar la piel que nos encierra
de amar esta prisión hecha a medida
un golpe bastará para sanarme
una palabra tuya me atraviesa.

Sin embargo, si me dices "mi amor"
siento un escalofrío
sea verdad o mentira.

Kirmen Uribe




miércoles, 17 de febrero de 2016

Vendo una jaula voladera de acero inoxidable.

La alambrada está cerca de mi casa.
Ya no pueden sus manos
detener el tráfico, subirnos
el rit mo
cardíaco.
La alambrada aminora los golpes
e impide el vuelo.
Nuestras madres no nos miran
jugar a las cabañas,
rasparnos las rodillas,
dormirnos al fuego, hacernos los dormidos.
La alambrada nos ha nombrado adultos
pero nunca les ha quitado el miedo:
todavía se despiertan, aseguran,
si pronuncias su nombre en voz baja
al otro lado del mundo.
Uno sabe poco, aún, pero recuerda
a qué lugar pertenece.

Me hicieron una oferta que no pude rechazar: esta jaula.
Carmen Camacho

martes, 12 de enero de 2016

.

Voy a seguir explorándote.
Voy a recorrerte de pelo a pelo a pelo.
Estoy buscando la raíz, lo que nos crece
en dirección contraria al espacio.
Entro en vena envenenando el mito
y voy a quedarme a este lado de la aguja
ondeando mi bandera de esparto.
Saludo a los que pasan con premura,
recojo lo que cae de sus bolsillos,
les tapo la boca a las señales,
y desde aquí condeno la esperanza
de encontrar el camino ya hecho.


Pasa el viento. Le llamo?
Jaime GIl de Biedma

viernes, 27 de noviembre de 2015

Y qué.

Existimos, en fin.
El superávit.
Los miedos, los mismos miedos,
Pero es la vida
que llega y amarra
y a veces, pocas veces,
tan
pocas
veces
se sigue simulando panorámica.
Y entonces una entiende
la gravedad de las cuentas
que no acaba de rendirse.
Lo lejos,
lo irremediablemente al fondo
que flotan
-porque flotan-
los restos boquiabiertos
de aquella que
-me empeño-
yo
ya
no
soy.